Ayer fue (aquí en los States) la Season Premiere de la segunda temporada de
Mujeres Desesperadas. Para aquellos que no hayais visto la primera temporada en TVE, sólo puedo deciros que mal hecho y que ya estais aprovenchando para verla ahora que la están repitiendo. Pasaré lista.
Como todo primer capítulo de temporada éste tampoco fue excesivamente interesante, aunque el momento Bree (la pelirroja) al final del funeral (no diré de quién, por si no habéis visto la primera parte) es impagable, y la familia nueva del barrio se las trae (tampoco os diré qué esconden en el sótano...). Pero sí os puedo contar cotilleos de sus vidas reales, ¿nop? La que hace de Gabrielle se divorció el año pasado y ya está rondando el matrimonio con un jugador de baloncesto. Y la que sí que se casa inminentemente es la que hace de Bree (¿nos invitará?). Ahhhh, pelea: por lo visto el año pasado casi se tiraron entre ellas de los pelos por una portada de la revista
Vanity Fair, en donde todas fueron fotografiadas pero al final en la portada fue sólo la que hace de Susan con un bañador escandaloso, mientras que Bree, Edie y creo que las demás terminaron en la contraportada interior de la revista. Así que para que esta temporada no hubiese energía negativa entre las chicas la cadena ha optado por hacer... ¡cinco campañas de publicidad distintas!, una para cada Mujer Desesperada.
Qué golfas... pero que sigan así de desesperadas.