¿Decisión acertada?

Hace un par de días, una decisión de un tribunal de arbitraje decidió que Austria tendrá que devolver a sus legítimos herederos cinco cuadros de Gustav Klimt, expoliados por los nazis durante la Segunda Guerra Mundial. Estos cuadros venían siendo expuestos en la galería Belvedere de Viena, y entre ellos se encuentran los dos retratos de Adele Bloch-Bauer, que son una parte de las obras más conocidas del autor. Entiendo que las obras de arte fueran robadas de forma ilegítima a esta familia judía, pero francamente desearía que los cuadros pudieran permanecer donde están para que toda la sociedad pudiera disfrutarlos como patrimonio público. Ojalá se pueda llegar a un acuerdo con la familia y que estos acepten los 135 millones de dólares en los que las pinturas se suponen valoradas. Aunque seguro que no lo harán, siempre podrían sacarles más partido vendiéndolos a posteriori en subasta pública en cualquier famosa galería de arte. Para mí es una gran pena.